sábado, 25 de noviembre de 2023

58. ¡EL APÓSTOL PABLO ADVIERTE CONTRA LA "TRADICIÓN" Y LA "FILOSOFÍA" COMO BASE DE LA FE¡


 Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo. (Colosenses 2:8).

Rodeados Por Las Costumbres Y La Influencia Del Paganismo, Los Creyentes De Colosas. Corrían Peligro de ser inducidos a abandonar la sencillez del Evangelio, y Pablo, al amonestarles contra esa posibilidad, les presentó a Cristo como el único que los podía guiar seguramente... "Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él; arraigados y sobreedificados en él, y confirmados en la fe, así como habéis sido enseñados, abundando en acciones de gracias" (Colosenses 2:6,7)...

Cristo había anticipado que se levantarían engañadores, por cuya influencia la "maldad" se multiplicaría y "el amor de muchos" se enfriaría (Mateo 24:12). Advirtió a sus discípulos que la iglesia correría más peligro por causa de este mal que por las persecuciones de sus enemigos.

Una y otra vez Pablo previno a los creyentes contra esos falsos maestros. Deberían precaverse de ese peligro más que de cualquier otro, pues al recibir a los falsos maestros, estarían abriendo la puerta a errores por medio de los cuales el enemigo podría embotar las percepciones espirituales y sacudir la confianza de los nuevos conversos al Evangelio.

Cristo era la norma por medio de la cual debían probar las doctrinas que se presentaran. Debían rechazar todo lo que no estuviera en armonía con sus enseñanzas.

Cristo crucificado por el pecado, Cristo resucitado de entre los muertos, Cristo ascendido a lo alto, ésta era la ciencia de la salvación que ellos debían aprender y enseñar.

Las amonestaciones de la Palabra de Dios respecto a los peligros que rodean a la iglesia cristiana, son para nosotros hoy. Así como en los días de los apóstoles, los hombres intentaron destruir la fe en las Escrituras por medio de tradiciones y filosofías, Hoy En Día, Por Medio De Los Agradables Conceptos De La "Alta Crítica", La Evolución, El Espiritismo, La Teosofía Y El Panteísmo, El Enemigo De La Justicia Está Tratando De Conducir A Las Almas Por Caminos Prohibidos.

Para Muchos, la Biblia es una lámpara sin aceite, porque han convertido sus mentes en canales por medio de los cuales fluyen creencias especulativas que producen falsos conceptos y confusión. 

La Obra de la (autollamada) "alta crítica", que consiste en disecar la Palabra de Dios, en tejer conjeturas acerca de ella, y en pretender reconstruirla, está destruyendo en realidad la fe en la Biblia como revelación divina. Está privando a la Palabra de Dios de la facultad de guiar, elevar e inspirar las vidas humanas.

  Mediante el espiritismo, multitudes son inducidas a pensar que el deseo es la ley más importante, q  ue el libertinaje es libertad y que el hombre es responsable sólo ante sí mismo... El poder de una vida más elevada, más pura y más noble, es nuestra gran necesidad. -Los hechos de los apóstoles, págs. 390, 391, 394. RJ336/EGW/MHP 337

AUDIO. https://www.youtube.com/watch?v=i19Nd59nOt8&list=PLtrFh-HO7ogBj4nqf1_gfHDnO7JHVPTor&index=26&pp=gAQBiAQBsAQB

jueves, 26 de octubre de 2023

57. “CONOCER A DIOS ES VITAL…”

Así dijo Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas. Mas alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Jehová. (Jeremías 9:23,24).

Una vez recibida la fe del Evangelio, la siguiente tarea del creyente consiste en añadir virtud a su carácter y así limpiar el corazón y preparar la mente para la recepción del conocimiento de Dios. 

Este Conocimiento es el fundamento de toda verdadera educación y de todo verdadero servicio. Es la única auténtica salvaguardia contra la tentación; y solamente eso puede asemejarnos al carácter de Dios. 

Por medio del conocimiento de Dios y de su Hijo Jesucristo, se imparte al creyente "…todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad…" (2Pedro 1:3).

Ningún buen don se niega al que sinceramente desea obtener la justicia de Dios. "Y esta es la vida eterna -dijo Cristo-: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado" (Juan 17:3).

Y el profeta Jeremías declaró:... "Yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Jehová" (Jer. 9:24).

Difícilmente puede la mente humana entender la anchura, la profundidad y la altura de las cimas espirituales a que llega el que obtiene este conocimiento.

Nadie necesita dejar de alcanzar, en su esfera, la perfección de un carácter cristiano. Por medio del sacrificio de Cristo se ha hecho provisión para que el creyente reciba todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad.

Dios nos invita a que alcancemos la norma de la perfección y nos pone como ejemplo el carácter de Cristo. En su humanidad, perfeccionada por una vida de constante resistencia al mal, el Salvador demostró que al cooperar con la Divinidad, los seres humanos pueden alcanzar en esta vida la perfección del carácter. Esta es la seguridad que Dios nos da de que nosotros también podemos obtener una victoria completa.

Delante Del Creyente se extiende la maravillosa posibilidad de llegar a ser semejantes a Cristo, obedientes a todos los principios de la ley... La santidad que según la Palabra de Dios debe manifestar antes de ser salvo, es el resultado de la obra de la gracia divina, a medida que se somete a la disciplina y a las influencias refrenadoras del Espíritu de verdad. 

La Obediencia del hombre sólo puede ser perfecta gracias al incienso de la justicia de Cristo, que satura de fragancia divina cada acto de obediencia. La parte que le toca a cada cristiano consiste en perseverar en la lucha para vencer toda debilidad de carácter.

 Debe orar constantemente al Salvador para que sane las dolencias de su alma enferma de pecado. No tiene la sabiduría ni la fuerza para vencer por sí solo; pertenecen al Señor, y El las confiere a los que buscan su ayuda humildes y contritos. -Los hechos de los apóstoles, págs. 438, 439. RJ306/EGW/MHP 307

AUDIO. https://www.youtube.com/watch?v=v7ucQpqpSXA&list=PLtrFh-HO7ogAhSCQQNknR0y3dwN8Pp3F9&index=27&pp=gAQBiAQBsAQB

 

sábado, 16 de septiembre de 2023

56. “LA OBEDIENCIA, FRUTO DE LA FE”

Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardarais mi pacto, vosotros seréis mí especial tesoro sobre todos los pueblos; porque mía es toda la tierra. (Éxodo 19:5).

La Obediencia, Es Decir, El Servicio Y La Lealtad De Amor, Es La Verdadera Prueba Del Discipulado.

 Siendo Así, La Escritura dice: "Pues Este es el amor a Dios, que guardemos sus mandamientos…" "El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él" (1Juan 5:3; 2:4).

En vez de que la fe exima al hombre de la obediencia, es la fe, y sólo ella, la que lo hace participante de la gracia de Cristo y lo capacita para obedecerlo.

No ganamos la salvación con nuestra obediencia (es complemento de la fe); (Citamos Santiago. 2:24 “Vosotros veis, pues, que el hombre es justificado por las obras, y no solamente por la fe”).

Porque la salvación es el don gratuito de Dios, que se recibe por la fe. Pero la obediencia es el fruto de la fe. “Sabéis que él apareció para quitar nuestros pecados, y no hay pecado en él. Todo, aquel que permanece en él, no peca; todo aquel que peca, no le ha visto, ni le ha conocido" (1 Juan 3:5,6).

(Tampoco podemos justificarnos o salvarnos solo por la fe sola Santiago. 2:14. Dice: “Hermanos míos, ¿de qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras? ¿Podrá la fe salvarle?).

He aquí la verdadera prueba. Si moramos en Cristo, si el amor de Dios mora en nosotros, nuestros sentimientos, nuestros pensamientos, nuestras acciones, tienen que estar en armonía con la voluntad de Dios como se expresa en los preceptos de su santa ley.

"Hijitos, nadie os engañe; el que hace justicia es justo, como él es justo" (1 Juan 3:7). Sabemos lo que es justicia por el modelo de la santa ley de Dios, como se expresa en los Diez Mandamientos dados en el Sinaí.

Esa Así Llamada Fe En Cristo, que según se declara exime a los hombres de la obligación de la obediencia a Dios, no es fe sino presunción. "Por gracia sois salvos por medio de la fe". Más "la fe, si no tiene, obras, es muerta en sí misma" (Efesios 2:8; Santiago 2:17).

 Jesús dijo de sí mismo antes de venir al mundo: "El hacer tu voluntad, Dios mío, me ha agradado, y tu ley está en medio de mi corazón" (Salmo 40:8).

Y cuando estaba por ascender a los cielos, dijo otra vez: "Yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor" (Juan 15:10).

La Escritura dice: "Y en esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mandamientos" (1Juan 2:3)...

La Condición Para Alcanzar La Vida Eterna es ahora exactamente la misma de siempre, tal cual era en el paraíso antes de la caída de nuestros primeros padres: la perfecta obediencia a la ley de Dios, la perfecta justicia.

Si la vida eterna se concediera con alguna condición inferior a ésta, peligraría la felicidad de todo el universo. Se le abriría la puerta al pecado con todo su séquito de dolor y miseria para siempre...

Cuanto más nos guíe la necesidad a Él y a la Palabra de Dios, tanto más elevada visión tendremos de su carácter y más plenamente reflejaremos su imagen. El camino a Cristo, págs. 60-62, 65. RJ266/EGW/MHP 267

AUDIO. https://www.youtube.com/watch?v=eNBwbc-skNg&list=PLtrFh-HO7ogB0b9ZH0YMA5EYtDsepZwEC&index=17&pp=gAQBiAQBsAQB